Amanece
el día no muy apacible, y Atreyu, con dos gotas caídas, ni se deja caer de la
cama, "Está lloviendo!!. No me esperéis", es todo lo que se puede
esperar de él, esta mañana. Y Pedrin, el fotógrafo oficial Jarrys, está ligeramente
perjudicado, del día de ayer, quizás le sento mal que ganara su equipo.
Dan
las 8:00, en el parque y estan Azu, Ángel, Miguel, Lobo, Manolo, e Isacio. Falta
Esteban, no puede ser el alma del día no puede fallar aparece cuando ya los
Jarrys se largaban, una necesidad, que solo podía hacer él, de última hora.
Para
los Hueros que van allí esperan Aga, y Pepe, que no tenían dorsal, pero debido
a la poca concurrencia, de bikers, por las 4 gotas, lo obtienen sin problemas.
Se
retrasa, un poco más de la cuenta, Pepe aprovecha para recoger firmas, para
conseguir una pasarela en las inmediaciones del puente de Zulema, consigue unas
pocas pero menos que la organización de la V Marcha mtb Los Hueros, que le dan
al menos diez hojas de firmas, hecho este que los Jarrys agradecen, desde este
blog enormemente, a la citada organización.
Dan
la salida y los Jarrys se integran en el grupo, que por cierto era este el
grupo más numeroso del evento, poco más de la ruta, es de todos conocidos, en el
track se muestra, quizás un poco más exigente que el año pasado, y el continuo
ahora me quito el chubasquero ahora me lo pongo.
Como
anécdota Fulgen a media ruta raja la rueda trasera, y todos los Jarrys paran
para ayudarle, no es necesario tanto dispendio, todos a seguir se les despacha
a Manolo y a Esteban, Angel, Lobo y Pepe, se quedan para echarle una mano, que quizás
no mereciera, una vez en marcha, se da cuenta que la rueda sigue perdiendo
aire, que mal coloca este tío las cámaras, sin tan siquiera comprobar si había
pinchos, por lo que decide acortar, al llegar a las antenas, sin que Pepe le
abandone, cosa que el si hace, con Pepe, que por eso llega el último del grupo.
Al
llegar a la meta refrigerio con bocata y refresco se puede repetir, pero no hay
cerveza que se le va hacer.
La
organización le da un lote que consta de un jamón y dos chorizos a los Jarrys
por ser el grupo más numeroso.
Y
a la mitad de los presentes y no presentes, les toca algún que otro premio en
el sorteo, que chorra tienen los Jarrys.
Y
sin más se encaminan cada uno como pueden hacia el Santacruz, donde saborean la
cerveza que llevaban un rato esperando.
Fermín,
a vuestro servicio.
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