miércoles, 18 de febrero de 2015

Vuelta al Atazar

Que ruta la de este domingo, no podéis imaginar la que os habéis perdido, que paisajes, que senderitos, trialeras e incluso las pistas entre pinos, en una palabra preciosa. No dude en hacerla, por dos razones por lo dicho en cuanto a su belleza y es que el track que subió Miguel me engancho y por otro lado iba un autentico Jarry “El Fulgen”, aunque se atreve con estos dos madelman, pensé ir en su apoyo.

La poca asistencia creo que no fue por las mala previsión del tiempo que daban para ese día, sino por diversas causas, trabajo, viajes al pueblo, etc. Y por miedo a los 1800 m. de desnivel que había que superar.

En fin comenzamos la etapa en el pueblo del Berrueco, Miguel Azu, Miguel, Fulgen y Pedrín, al principio con un poquito de llovizna, nada apreciable e inmediatamente nos apareció el solecito prácticamente toda la mañana y buena temperatura.

Al inicio y bordeando el embalse pinchazo de Azu y recogida de setas por parte de éste, sin incidentes. Dado el entramado de senderitos el Guía nos perdió en varias ocasiones, pero no perdimos la confianza en él y seguimos adelante. Llegamos a la presa del Villar y al cruzarla empezamos a subir hasta Robledillo de la Jara, continuando hasta el pueblo del Atazar por unas trialeras preciosas, aunque ahí le vimos a Fulgen un poco protestón, surgiendo la frase del día (Miguel hace alusión a que son bonitas y se pueden hacer, y Fulgen atrás y por lo bajini dice “si tu lo dices” y vino el jajaja, me partía de risa por la forma que lo dijo).


Bajamos y siguiendo el curso del río, venia lo peor la subida que conocemos como las abejas, ahí Azu tiro y nos dejo a Miguel, Fulgen y Pedrín a un ritmo constante y sostenible, arriba un pequeño descanso porque sabíamos que todavía nos quedaba mucha subida, ya por pista pero dura, arriba ya nos empezaron a faltar las fuerza, hasta tal punto que a Miguel le empezaron los primeros amagos de calambres, hasta aquí Miguel muy bien, pero hay que entender que estas tan duras y muchas horas después de ese largo parón esto es normal, ánimo Miguel con un poquito de entrenamiento solucionado.

Opto junto a Fulgen atajos por carretera y a Azu y a Pedrín en dos ocasiones nos indico seguir, en la primera muy bien y buena sincronización para encontrarnos, en la segunda el jodio no nos informó que nos íbamos a encontrar y nosotros no nos acordábamos pero nos chupamos una bajada y subía a empujabike que terminamos agotados, mereció la pena por las trialeras por las que pasas, continuamos con ellos y la finalizamos al las 15:30, total 6 horas y medias. Muy bonita pero dura.

Conclusión me gusto mucho volvería ha hacerla, merece la pena aunque se sufra un poquito.







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