domingo, 4 de febrero de 2018

Una antilluvia


Esta mañana, ha amanecido un poco lluviosa, por lo que solo se esperaba la salida de algún insensato como Azu, Isacio, y quizás Aga, pero resulta que han salido Azu, como era de esperar e Isiaco, pero nadie se esperaba que saliera el huevón de Fulgen, me han comentando de buena tinta, que quería hacer las paces con Azu, ya que el último domingo le arroyo, y estaba un poco acojonado.

Con estos tres tipos se da por buena la ruta, y hacen una antibarro y antilluvía que no se aún como es esto, pero se encaminan hacia el viso por carretera, subiendo el Zulema, llegan a los caballos y bajan por la pista de la derecha hasta el final, Isacio decide seguir llaneando para subir por la otra vertiente, por mucho barro que haya que lo hubo, , lo prefiere antes que volver a subir, recordar que lleva lesionado más de 15 días y era su primera salida, demasiado bien se porto.

Se encuentran los tres otra vez en la subida típica de los caballos, per Isacio va como un tiro y no consiguen cogerlo, ya que cuenta con una leve ventaja, pero eso no era óbice para que le hubieran cogido Fulgen y sobre todo Azu, que parece haber salido de paseo, una vez arriba deciden bajar por trialera hasta medios caballos, pero Fulgen no se fia del barro o de lo torpon que es, y baja por pista, se encuentran y vuelven a subir.

La mañana era desapacible, pero no llovía mucho, pero en este punto deciden volver, siendo las 10:45, ya que parece que el tiempo se vuelve aún, mas desapacible con más lluvias unos copos de nieve y mucho viento, bajan tirantando al menos Isacio y Fulgen, ya que Azu, es más duro que una piedra, y se refugian en el Santacruz para calentarse, siendo la primera vez que la cerveza no es lo habitual, ya que la cambian por un carajillo y una copa de coñac para entrar en calor, Azu, como iba entonao, ni para, sigue su camino en bici hasta Azuqueca.


Fermin a su servicio








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