José Luis estaba muy contento, estaba un poco ansioso ante la llegada del primer día de la temporada de bici, comenzaba un nuevo curso rutero. Había convocado a sus amigos y esperaba con ansia que llegara el momento.
Había pasado los días de verano en la montaña de los Aquilianos, imaginando sobre el terreno, rutas y enlaces imposibles y probando las ventajas de uno u otro alojamiento. Lo disfrutó como otras tantas veces, y solo podía pensar en acudir el primer día para contarlo a sus amiguitos.
... y llegó el domingo, por fin el
gran día!!, José Luis estaba muy emocionado. Habían respondido a su llamada Esteban
y Guille antiguos amigos
Sonó el despertador “ring – ring - ring”, ya era hora de levantarse,
se vistió con su ropa jarry de hace 20
años, se puso su Camel llena de aventuras para contar,
cargo su bici en el coche e inició su primer gran día.
Cuando llegó a la entrada del Parque-Escuela, le estaban esperando los maestros: Fernando, Roberto y Julio. Jose Luis les entregó la redacción que había preparado y que no era otra que la ruta del día. Los profes le dieron su aprobación.
La ruta contemplaba tres exámenes que los compañeros deberían
pasar: Subidas al Alto del Llano, Repetidor de Anchuelo y Alto del cerro de los
Toreros en el Camino de los Eros, una dura prueba para ser el primer día.
Así que José Luis paso a saludar al resto de compañeros que
completaban la clase en ese día: Isacio el repetidor, el Wisa, que le recordó que,
cuidado con él, que el se marca su propio ritmo y que está en el pódium de la
clasificación.
Especial cariño mostró Esteban y
Guille. Alumnos de la vieja escuela jarry de la que se habían graduado hace
tiempo y a la que esperan volver a clases esporádicamente o a algún curso de
recuperación de talón o jornadas deportivas ocasionales.
También se presentó quien escribe,
con el alumno Iván, todavía pertenece a la clase de los pequeños; a veces, viene a aprender lecciones de los mayores y .. siempre atrás, el último, como su padre!!.
Los que creían que hoy solo
tocaba recreo y pronto para casa se equivocaban. Con un tiempo excepcional subimos
al Alto del Llano, no sin antes y en primer cruce la mitad tirad para un lado y
la mitad para otro: seguimos track!.. seguimos track!! Nos repetíamos los
compañeros para no perdernos.
En la Casa del Llano, dudamos
para hacer el Alto completo y bajar a 4 caminos, pero los profes repitieron:
seguimos track! Seguimos track!! Así que bajamos por el camino de la Casa del Llano,
recientemente arreglado y que parecía el suelo de una autopista dirección Anchuelo.
Subimos el repetidor cada uno a
su marcha, en el Alto Guille se despide de la clase; él está en periodo de
adaptación y solo está hasta media mañana hasta que pueda venir a clase el día
completo. Ha ido muy bien y a su ritmo. Estoy seguro que pronto acabará su
rehabilitación y se incorporará con normalidad al grupo.
Tomamos refrigerio y volvemos por
Santorcaz hacía Anchuelo por la trialera, muy cerrada y en la que nos salen al
paso “gatos” en forma de ramas, zarzas y tallos que a algunos nos despellejan!!
para remate giramos a la derecha para entrar en Anchuelo por trialera, al alumno
Esteban le trae recuerdos de experiencias en cursos pasados: - por aquí se baja
mejor?? je je, la experiencia es un grado y no se fía de ningún comentario de
la clase Jarry.. mejor?? – ni de coña!!!
Llegamos a Anchuelo y tras coger
agua nos disponemos, sin muchas ganas, a afrontar la última subida del camino
de Eros hacia Villalbilla.
Pedazo subidón que nos deja molidos,
para ser el primer día. Ya en la bajada algunos hacemos senderito hacia el
cementerio, pero está también muy cerrado y eso hace que no se disfrute.
Ya a esta alturas… ni track ni
leches!! Hemos oído la campana que anuncia el final de la clase en el Santa
Cruz y hacía allí nos dirigimos en pequeños grupos … lo de siempre, el consabido tema que nos
sucede cuando la clase está a punto de acabar: Pancho Villa y su ejército!!
Finalizamos la clase y el primer día
de cole en el Santa Cruz. Pasamos por el despacho de su Director Isi que nos
riega con cerveza fresquita y las tapas de siempre.
Hemos echado de menos a otros
amiguitos del grupo, “los malotes del Val” que aunque temidos no son abusones o
nos les dejamos… a ver si nos reencontrarnos todos pronto y tenemos un curso
lleno de aventuras y emociones bonitas.
El primer día de cole de José Luis,
aunque nervioso, lo pasó con nota. Todos sus compañeros le quieren y le pidieron
que haga mas redacciones y rutas.
SALUD Y HONOR
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