Después
de la vuelta de los leones de Navarra, en homenaje y para su recibimiento se
pensó convocar una pachanguita para lograr una mayor asistencia de los Jarrys y
nos contaran su andanzas por esas tierra.
Una vez convocada y calentando al personal
por parte de Pedrín en el wasa, la cita no ha estado mal, ha sido un éxito,
aunque han faltado alguno por diversos motivos, pues hemos sido una docena de
Jarrys (Guille, Fran, Lobo, Pepe, Azu, Fulgen, Aga, Miguel, Ángel, Juanjo, Isacio,
y Pedrín).
Ruta en principio sin definir, eso sí, la
pachanguita pensada en principio, se ha tenido que ir cambiando dado el nivel
de los asistentes, ya en la salida se comenta lo que podíamos hacer y algún
llorón protestaba (ese ha sido Juanjo, diciendo ¡cuidadín que no estoy bien!).
Nos ha alegrado mucho volver a ver a Fran en esta pachanguita, jajaja, como así
la ha calificado el Sr. Azu, Fulgen ya desde la salida protestón en la línea de
Navarra.
Iniciamos hacia las crestas con un buen
ritmo, como así ha sido casi toda la ruta, no correspondiéndose al título de la
convocatoria que dice “pachanguita”, culpable el de siempre, teniendo muy buena
respuesta por parte del conjunto. Azu nos ha fallado, mucho de boquilla y la
subida de la cuesta del elefante nos ha dejado con las ganas de verle subir, ya
se sabe perrito ladrador poco mordedor, alias pulgoso.
Lo bueno estaba por venir y a partir de este
punto Fulgen empieza a protestar y a llorar, yo creo que se olía la que nos
tenía preparada Miguel, pateo para conseguir encontrar un camino que nos
llevara a la trialera dirección a la bajada del cementerio, ahí no solo lloraba
Fulgen, sino que el huevón ha abortado y ha tirado pa bajo a pocos metros de la
trialera que he dicho, que tío más indisciplinado que ha venido de Navarra,
habrá que trabajar para volverle a meterle en el redil. Miguel no te preocupes
por esta cagadita, mi voto lo tienes para el cargo de jefe de rutas, al fin y
al cabo hemos conseguido el objetivo y por una trialera preciosa con vista del
pueblo de Villalbilla que son impresionantes.
El objetivo la bajada del cementerio, lugar
que hay que decir que hablamos de una bajada de palabras mayores, doy fe que no
la hemos bajado todos, jajaja, solo especificar que dos que no haría falta
decir sus nombres, ya que abajo se les reconocía por sus caritas de
satisfacción y a la vez que le salía la adrenalina por las orejas, bueno lo
diré Miguel y Juanjo se la han bajado subidos en la bici, si es que no podían
ser otros “estos tios están locos” vaya huevos.
A partir de aquí todo normal, trialera del
cementerio, siguiendo por la trialera denominada de Pepe, bordeando el campo de
golf, hacia antenas, donde nos deja Juanjo, buen ritmo a Santorcaz y bajada
trialera a Anchuelo, para volver por pista hasta el portillo de Anchuelo,
siendo en este tramo un ataque a Fulge que había sido pactado para terminar
cabreándole, dado lo protestón que ha estado en toda la ruta, no ha sido
posible ha dado todo lo que podía y aunque no se nos ha ido, no hemos podido
humillarle, que tío si cuando quiere puede, pero…..Finalizando con unos
lagartos que para la época que estamos no estaban del todo cerrados.
Charlita en el Santacruz acompañado de la
respectivas jarritas fresquitas, compartidas con el Sr. Atreyu,
que nos ha mostrado sus heridas de guerra, comentándonos que va mejor. Fulgen
flojito en las Jarrys, pero el Pedrín le ha calentado y se lo ha llevado a su
barrio y en Menotti se ha tomado otra casi de un trago, quitándose el san
Benito que le habían colgado en Navarra, en presencia del notario Pepe.
Un saludo a todos los Jarrys y nos vemos en
la próxima.